El Departamento de Geofísica de la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas (FCFM) de la Universidad de Chile, en colaboración con especialistas de la Universidad de Tokio, la Universidad de Kobe, la Agencia Japonesa de Ciencias Marinas y de la Tierra y la Universidad de Concepción, realizó un hallazgo científico de alcance internacional que corresponde a la primera evidencia directa de una fisura de placa (slab window) en el Punto Triple Chileno, un área única donde confluyen las placas de Nazca, Antártica y Sudamericana, que se habría iniciado hace más de 300 mil años.
La revista Geophysical Research Letters publicó el artículo “Shallow Tectonic Tremors Reveal the Beginning of the Slab Window at the Chilean Triple Junction”, escrito por la investigadora Kellen Azúa y el académico Sergio Ruiz (ambos del DGF-FCFM), junto a Satoshi Ide, Seiya Yano, Hajime Shiobara y Hikaru Iwamorila (Universidad de Tokio); Hiroko Sugioka (Universidad de Kobe); Aki Ito (Agencia Japonesa de Ciencias Marinas y de la Tierra); y Matthew Miller (Universidad de Concepción).
Según explicó la autora principal del estudio, los resultados obtenidos muestran una separación entre los eventos sísmicos y los tremores tectónicos (vibraciones de naturaleza más sostenida) analizados.
"Descubrimos que, mientras la sismicidad provenía cerca de la fosa donde se encuentra el Punto Triple Chileno, los tremores tectónicos se ubicaban más al este, según los datos que analizamos, uno de los factores principales de la separación entre ambos tipos de eventos sería el distanciamiento que se está generando entre dos placas oceánicas en subducción: la Oceánica y la Antártica", precisó Kellen Azúa.
La investigadora del DGF relató que la motivación para investigar sobre el fondo marino al sur de Chile nació como parte de su tesis doctoral sobre búsqueda y caracterización de tremores no volcánicos y fue posible gracias a una colaboración con investigadores de la Universidad de Tokio, quienes en 2019 instalaron una red temporal de sismómetros oceánicos en el fondo marino frente al sur de Chile que recogió información hasta 2021.
Kellen Azúa sostuvo que la posibilidad de acceder a los datos obtenidos por la red temporal de sismómetros representó una oportunidad única, porque “nos permitió estudiar con mucho detalle un área muy difícil de investigar por encontrarse mar adentro y, además, descubrir qué ocurre en las cercanías del Punto Triple Chileno, un lugar muy particular en la Tierra, donde un centro de expansión activo está subductando bajo una placa continental”, aseguró.
A días de conocerse los resultados del trabajo, "Shallow Tectonic Tremors Reveal the Beginning of the Slab Window at the Chilean Triple Junction", la comunidad geocientífica y publicaciones especializadas como la revista Research Spotlight han calificado el hallazgo como "la primera evidencia directa de la fisura entre dos placas en subducción en el borde marino".
Un reconocimiento que para el académico del DGF y coautor del trabajo, Sergio Ruiz, refleja la calidad del trabajo liderado por la investigadora Kellen Azúa. “El hecho de que la comunidad geocientífica haya validado el aporte de esta publicación refleja la importancia de contar con datos instrumentales y tener la capacidad de procesarlos para responder preguntas novedosas y disruptivas”, subrayó.
Sobre este punto, la investigadora del DGF expresó su satisfacción por los comentarios recibidos. "Me alegra mucho que el paper haya tenido buena acogida entre mis pares. Para mí es una señal del gran interés que existe en la comunidad de conocer en profundidad lo que ocurre en las cercanías del Punto Triple Chileno y también me motiva a seguir desarrollando el estudio de terremotos lentos en el país", aseguró.