La ceremonia universitaria que fue presidida por la Rectora subrogante, profesora Alejandra Mizala, contó con la presencia del decano profesor Pablo Richter, la vicedecana profesora Paz Robert y el decano de la Facultad de Artes, profesor Fernando Carrasco. Además de otras autoridades universitarias, directivos, investigadores/as, académicos/as, estudiantes y personal de colaboración, quienes destacaron el papel fundamental del Dr. Smith en la creación de nuevas metodologías para el estudio de procesos biológicos esenciales, así como su generoso apoyo al fortalecimiento de capacidades científicas en América Latina. Un momento especialmente emotivo se vivió con la presencia de sus hijos: Ryan, quien viajó desde Estados Unidos, y Warren, que llegó desde España, ambos profundamente conmovidos por el reconocimiento brindado a su padre en el Aula Magna de nuestra Facultad.
En su discurso, la Rectora subrogante Alejandra Mizala destacó la "capacidad visionaria" del galardonado para extender las fronteras del conocimiento. Por ejemplo, "gracias a estos avances, científicos y científicas de todo el mundo cuentan hoy con herramientas que cambiaron para siempre la forma de abordar el estudio de las enfermedades. Por eso podemos decir que la trayectoria del Dr. Smith nos recuerda que la ciencia no solo se mide por métricas o índice de citación, aunque en su caso también alcanzan cifras extraordinarias. Su verdadero valor está en la capacidad de transformar la vida de millones de personas al cambiar la manera en que se estudian y tratan las enfermedades. Su investigación ha tenido un impacto profundo en la salud y bienestar de la humanidad", afirmó.
Un pionero de la biofísica experimental
Nacido en Seattle en 1946, el Dr. Smith desarrolló una carrera excepcional que revolucionó el estudio de las moléculas biológicas. “Cuando tenía 10 años, mis padres me regalaron un libro fascinante, aunque anticuado: la segunda edición de The Boy Electrician, escrito por el ingeniero eléctrico Alfred Powell Morgan, quien explicaba cómo realizar proyectos eléctricos caseros”, comenzó relatando el Dr. Smith.
Así comenzó su relato, que lo llevaría a convertirse en un pionero en la observación de moléculas individuales de ADN en geles de agarosa. Más adelante, junto al Dr. Carlos Bustamante, introdujo innovadoras técnicas como las pinzas magnéticas y las pinzas ópticas, que hicieron posible manipular y medir directamente las fuerzas ejercidas sobre moléculas como el ADN y las proteínas.
Estas tecnologías dieron origen al campo de la biofísica de molécula única, revolucionando áreas como la bioquímica, la genética y la medicina. Uno de sus descubrimientos más relevantes fue la identificación de una nueva estructura del ADN conocida como S-DNA, presentada en un artículo en Science en 1996, con más de 3.600 citas. Asimismo, sus trabajos sobre motores moleculares, como el empaquetamiento del ADN en virus, han sido fundamentales para entender procesos celulares con precisión mecánica.
Un legado con impacto en Chile y el Cono Sur
Tras su retiro del Instituto Médico Howard Hughes en 2009, el Dr. Smith continuó activo como consultor independiente a través de su empresa Steven B. Smith Engineering, desde donde asesoró a centros de investigación de todo el mundo.
En Chile, su influencia ha sido profunda y sostenida. A partir de su colaboración con los profesores Christian A. M. Wilson y Mauricio Báez Larach, adscritos al Departamento de Bioquímica y Biología Molecular, de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas, se estableció un laboratorio de biofísica de moléculas individuales en la Facultad. Gracias a esta colaboración, se instalaron en 2014 y 2022 dos equipos miniTweezers, desarrollados por el propio Dr. Smith, únicos en el país y pioneros en Latinoamérica.
Además, participó activamente como asesor en múltiples proyectos FONDECYT y formó parte de redes de colaboración con otros centros del país, como la Universidad de Concepción. En el ámbito regional, fue también responsable de la instalación del primer laboratorio de pinzas ópticas en el Cono Sur, en la Universidad Peruana Cayetano Heredia.
Un reconocimiento merecido
Con más de 60 publicaciones científicas, un índice H de 36, tres patentes de invención y una extensa red de colaboración internacional, el Dr. Steven B. Smith ha dejado una huella indeleble en la ciencia contemporánea. La Universidad de Chile reconoció con este grado honorífico no solo su excelencia científica, sino también su generosidad, su rol formativo y su compromiso con el desarrollo del conocimiento más allá de las fronteras.
“La distinción de Doctor Honoris Causa al Dr. Steven B. Smith constituye un merecido reconocimiento a su trayectoria científica y sus contribuciones al desarrollo de la biofísica y de la ciencia, tanto en Chile como en el mundo. Apreciado Dr. Smith: por su espíritu pionero, que le permitió ver lo que nadie antes había visto y, con ello, abrir un nuevo campo del saber humano; por su ingenio excepcional, que transformó ideas audaces en instrumentos que han empoderado a científicos de todo el mundo para explorar los misterios de la vida a una escala sin precedentes; y muy especialmente, por su profunda y sostenida generosidad, por su rol como mentor y su contribución transformadora al desarrollo de la ciencia en Chile”, narró el decano Richter.
Durante la ceremonia, se hizo entrega de la medalla "Doctor Honoris Causa", una distinción que consiste en un disco de oro circular de 38 milímetros. En su anverso, la pieza presenta una leyenda semicircular en la parte superior con la inscripción “Universidad de Chile”, acompañada del escudo de la casa de estudios, los símbolos de sus facultades originarias y una estrella radiante rodeada por ramas de encina y laurel. En el reverso, lleva grabada la leyenda “Doctor Honoris Causa”, junto al nombre del galardonado.
Junto con la medalla, también se entregó un diploma oficial con el escudo de la Universidad de Chile, en el cual se consigna el nombre completo del condecorado y la actividad en la que destaca, documento que cuenta con las firmas de la rectora y la prorrectora.
De esta forma, se destacaron sus contribuciones al avance de la investigación en salud, su apoyo a científicos chilenos e internacionales, y su legado como constructor de instrumentos de frontera que hoy son esenciales en laboratorios de todo el mundo.
"La ciencia real es divertida"
Luego de finalizada la ceremonia, la jornada no podía concluir sin las palabras del propio Dr. Smith, quien con sencillez y cercanía compartió una reflexión sobre lo que para él significa la ciencia y el espíritu que la impulsa. “Estoy muy agradecido. Amo Chile. Realmente. Sí, creo que es un país maravilloso. En particular, Santiago: su clima es agradable, la gente es estupenda”.
“La ciencia real es divertida. No es algo que uno se proponga demostrar, ni tampoco una carrera en sí misma. Es más bien como un pasatiempo, algo que disfrutas hacer. Es un poco como resolver acertijos. Yo no busco a propósito problemas imposibles de resolver, pero constantemente se nos presentan muchísimas preguntas sobre la naturaleza, los materiales, la medicina y la vida. Y son preguntas valiosas, que merece la pena intentar responder. Es bueno, además, crear tus propias herramientas para hacerlo, porque eres tú quien mejor sabe usarlas. Y si fabricas tus propios instrumentos, puedes adaptarlos con rapidez a nuevas situaciones. Por esa razón disfruto mucho creando instrumentos”, añadió.
El reconocimiento a su padre, en palabras de sus hijos
Steven compartió este momento trascendental junto a sus dos hijos, quienes, con evidente emoción, lo acompañaron mientras recibía una vez más el reconocimiento a su vida y obra.
Warren Smith, hijo del homenajeado, señaló que: “Haber recibido este honor, que representa un momento de ciencia, de investigación, de invención, de estudio, de trabajo constante sin parar ni un minuto ni un solo día, y llegar hasta aquí, es realmente un honor al ver reconocido este nivel de dedicación en su labor y en su vida, en la forma en que comparte lo que tiene con los demás. Es algo muy especial, y estoy muy, muy orgulloso de él. También me hace muy feliz poder estar aquí y acompañarlo en este día”, se expresó en español; ha vivido los últimos 12 años en España.
Otro de sus hijos, Ryan Smith, agregó que: “Me siento muy orgulloso de mi padre. Ha sido realmente interesante observar la evolución de su trayectoria en la ciencia a lo largo de las décadas, porque comenzó cuando yo era un niño, y ahora tengo casi 50 años. Ver su progreso durante todo este tiempo, acompañarlo en este viaje por distintas universidades y en los diferentes lugares donde vivimos, ha sido una experiencia muy significativa. Estoy muy orgulloso de él y me alegra que reciba el reconocimiento que, en mi opinión, merece en el campo de la ciencia. Quiero reiterar que estoy profundamente orgulloso y feliz de estar aquí con él. Esta es apenas mi segunda vez en Chile”, finalizó.
Mientras los asistentes se dispersaban lentamente bajo la lluvia y las palabras del homenajeado seguía resonando, recordando que la ciencia también se construye a partir de los vínculos humanos, el reconocimiento mutuo y la generosidad de compartir el conocimiento con todos los rincones del mundo.
El profesor Wilson no escatimó su entusiasmo con las palabras del decano, quien señaló que se estaba haciendo justicia con el homenajeado. Destacó que la carrera del Dr. Steven Smith no ha sido convencional: en lugar de seguir la ruta típica de académico y profesor, se centró en la investigación, desde donde construyó un amplio mundo de apoyo y enseñanza: “Creo que hoy se hace justicia y se reconoce a Steven en toda su gloria y majestad, por lo bien que ha hecho su trabajo”, afirmó el director de Relaciones Internacionales de la Facultad.