En poco más de un mes comenzará un nuevo año académico y la U. de Chile está preparada para recibir a quienes ingresan por primera vez a la educación superior, y también a quienes siguen cursando sus carreras.
En medio del contexto de pandemia, y pensando en entregar las mejores soluciones a las y los estudiantes, la U. de Chile inauguró -a fines de 2021- 16 nuevas salas híbridas en el Campus Juan Gómez Millas, las que se suman a las 72 ya disponibles en el plantel. Estas instalaciones cuentan con tecnología de última generación, con sistema de audio, micrófono y pizarra guiada con inteligencia artificial, lo que permitirá que tanto los y las estudiantes que estén de manera presencial en el aula, como quienes estén de manera remota en sus hogares, pueden acceder de forma óptima al contenido de la clase.
La vicerrectora de Asuntos Académicos de la Casa de Bello, Rosa Devés, destacó la implementación de estos espacios, valorando lo logrado a partir de un trabajo colaborativo entre las vicerrectorías de Tecnología de la Información y Asuntos Académicos, los equipos del Campus y de las distintas unidades académicas “para lograr estas salas híbridas, con una tecnología del mejor nivel, que han sido resultado del estudio, de conversaciones con los profesores y profesoras de las distintas disciplinas, para que sean las mejores salas para su docencia”. Agregó, en esta línea, que “el proceso que se ha llevado a cabo para llegar a este resultado es ejemplar en la Universidad. Es un momento de mucha esperanza y mucha alegría de poder tener esta infraestructura”.
Por su parte, Darío Riquelme, gestor de proyectos de la Oficina de Educación Online (EOL), explico en qué consisten las salas y con qué se encontrarán durante 2022 los estudiantes. “Tenemos una cámara para el profesor, microfonía y audiofonía de muy buena calidad, de modo que en la sala se escuchan muy bien los estudiantes que están en casa y en casa también escuchan bien a los estudiantes que están en sala, lo que era súper importante para producir el efecto de la sala híbrida”, dijo.
Añade, por otra parte, que desde lo práctico, “aparte de las cámaras, tenemos el monitor de retorno y tenemos una cámara dedicada a la pizarra, de modo que al profesor le pudimos devolver este espacio. El profesor llega a su sala y tiene plumones y ocupa su pizarra como siempre la usó en el tiempo, y esta cámara captura lo que está dentro de la pizarra y transmite con bastante nitidez porque tiene una especie de filtro con inteligencia artificial que transmite solo lo que el profesor escribió”.