La Ceremonia de Certificación Final del Segundo Acuerdo de Producción Limpia Educación Superior Sustentable (APL II), organizada por la Agencia de Sustentabilidad y Cambio Climático (ASCC) de Corfo y la Red Campus Sustentable (RCS), reunió este 5 de noviembre a representantes de 17 instituciones de educación superior. En total, 50 instalaciones pertenecientes a estas 17 instituciones —entre ellas la Universidad de Chile— alcanzaron el Nivel 3, el máximo establecido por el acuerdo.
Este logro marca un hito para la educación superior chilena y refleja el compromiso sostenido de las instituciones, equipos y comunidades universitarias que avanzan con decisión hacia un desarrollo más sustentable.
El rector de la PUC, Juan Carlos de la Llera, destacó el carácter colaborativo del proceso. “Esta hoja de ruta compartida refleja el espíritu del ODS 17, que nos invita a fortalecer más y mejores alianzas para el desarrollo sostenible. Aquí convergen múltiples entidades públicas y privadas, con las que compartimos la tarea común de colaborar y cuidar nuestro planeta y a las personas que habitamos en él.”
El APL II, firmado en 2021, impulsó a las instituciones participantes a fortalecer su gobernanza ambiental, cultura sustentable, academia, gestión de campus y vinculación con el medio. En el caso de la Universidad de Chile, la instalación certificada corresponde a la FCFM, que fue reconocida por su cumplimiento de las metas del acuerdo y su liderazgo en sustentabilidad.
FCFM: compromiso y liderazgo en sustentabilidad
Para la vicedecana de la FCFM, Prof. Marcela Munizaga Muñoz, la certificación refleja un esfuerzo colectivo sostenido. “Estos acuerdos nos desafían, nos ponen metas exigentes y nos obligan a avanzar decididamente en la línea de la sostenibilidad. Estamos muy contentos y orgullosos; hoy es un momento de celebración, y ojalá otras facultades y campus se entusiasmen, porque realmente vale la pena”, señaló.
La autoridad destacó además que este tipo de procesos fortalece el compromiso de toda la comunidad, asegurando que “los funcionarios, académicos y estudiantes se involucran, y eso permite avanzar en algo que como sociedad estamos obligados a asumir”.
El logro de la FCFM se enmarca en un esfuerzo mayor de la Universidad de Chile por consolidar una cultura institucional orientada a la sustentabilidad. La secretaria ejecutiva del Comité por la Sustentabilidad, Claudia Rojas Pinochet, afirmó que “la reportabilidad siempre ha sido un desafío, pero nos permite autoevaluarnos, reflexionar y avanzar identificando fortalezas y brechas. Este año logramos avances muy importantes, y el APL nos impulsa a seguir trabajando de manera unida y colaborativa en todas las unidades académicas”.
Como parte de este proceso, el APL II estableció un marco común para que instituciones de educación superior de todo el país avanzaran en sustentabilidad de manera integral. Alineado con la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), el acuerdo definió 5 metas y 116 acciones en ámbitos como gobernanza, cultura sustentable, academia, gestión de campus y vinculación con el medio, cuyo cumplimiento se evaluó durante un periodo de 36 meses bajo un esquema progresivo de certificación.
En este sentido, la FCFM ha fortalecido una agenda robusta de sustentabilidad, plasmada en su Memoria de Sustentabilidad 2024. Entre los principales avances destacan el fortalecimiento de su gobernanza interna a través del Consejo Consultivo de Sustentabilidad; la expansión del Sistema de Gestión Integral de Residuos ReBeauchef —que valorizó cerca de 70 toneladas en 2024, un 34% más que el año anterior—; la ampliación de infraestructura sustentable mediante proyectos de eficiencia energética, energías renovables, biodiversidad y puntos de agua filtrada; y la profundización de la formación en sustentabilidad. Estos avances, junto con la cuantificación de huellas de carbono y múltiples iniciativas comunitarias, contribuyeron directamente a la obtención del Nivel 3 del APL II.
Un proceso exigente y colaborativo
Pablo Garrido, jefe de la Oficina de Ingeniería para la Sustentabilidad de la FCFM, explicó la magnitud del desafío que significó este segundo proceso de certificación, asegurando que “fue muchísimo más exigente, con una cantidad mayor de metas y acciones. Hoy esta certificación representa el mayor logro en sustentabilidad para la facultad, y me atrevería a decir también para la Universidad de Chile”.
El profesional enfatizó que no se trata de un punto de llegada, sino del inicio de nuevas metas. ”Tenemos desafíos en carbono neutralidad, eficiencia energética, energías renovables y conservación de ecosistemas. Ojalá que este logro sea un puntapié inicial para avanzar de manera sostenida frente a la crisis climática y ecológica.”
Asimismo, destacó la importancia del trabajo en red, ya que “estos cambios no se pueden hacer de manera aislada. Es vital compartir conocimientos y fomentar alianzas. Ya existe una construcción desde las bases que quiere avanzar, y debemos articular ese impulso con las autoridades para cumplir los compromisos que la universidad ha asumido”.
Por su parte, la presidenta de la Red Campus Sustentable, Karina Toledo, valoró el impacto del acuerdo para las instituciones participantes. “Este acuerdo nos puso el pie en el acelerador para avanzar con mayor decisión en los enormes desafíos que enfrenta la humanidad.”
Asimismo, explicó que el propósito general del APL II fue “integrar la sostenibilidad de manera transversal, considerando todas sus dimensiones, y fortalecer la cultura de la sustentabilidad para responder adecuadamente a las crecientes demandas sociales y ambientales.”
Un acuerdo con apoyo interinstitucional
El APL II fue impulsado por la ASCC y la Red Campus Sustentable, con la colaboración técnica de los Ministerios de Energía, Medio Ambiente y Salud, además de la Agencia de Sostenibilidad Energética.
La ceremonia contó con autoridades del ámbito académico y público, entre ellas el subsecretario de Energía, Luis Felipe Ramos; y representantes de diversas agencias públicas.
Durante la actividad, el subdirector de la ASCC, Sebastián Carvallo, destacó que “la incorporación de la sustentabilidad en académicos, funcionarios y futuros profesionales es clave para acelerar la acción climática tan necesaria en Chile”.
Un avance para todo el sistema de educación superior
El encuentro continuó durante la jornada con una charla magistral, paneles y talleres temáticos orientados a repensar el papel de las instituciones de educación superior frente a la crisis climática.
Con esta certificación, la Facultad de Ciencias Físicas y Matemáticas de la Universidad de Chile, como instalación acreditada en el marco del APL II, consolida su liderazgo y reafirma su compromiso con una educación superior más sustentable, colaborativa y orientada al futuro.