Investigadoras de centros FCFM se adjudican fondos de investigación estratégica en sequía

Investigadoras de centros FCFM ganan fondos para estudiar sequía
Linda Daniele, investigadora del Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA) y académica del Departamento de Geología.
Linda Daniele, investigadora del Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA) y académica del Departamento de Geología.
Andreina García, investigadora del Centro Avanzado de Tecnología para la Minería (AMTC) y profesora en los departamentos de Ingeniería Civil e Ingeniería de Minas de la FCFM.
Andreina García, investigadora del Centro Avanzado de Tecnología para la Minería (AMTC) y profesora en los departamentos de Ingeniería Civil e Ingeniería de Minas de la FCFM.
La investigadora Camila Álvarez, del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2.
La investigadora Camila Álvarez, del Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2.

Acelerar los resultados de investigaciones y desarrollos tecnológicos que permitan aportar al diseño de políticas públicas o apoyen la toma de decisiones en temas de sequía y sus consecuencias, están entre los objetivos del Fondo de Investigación Estratégica en Sequía, de la Agencia Nacional de Investigacióny Desarrollo (ANID), cuyos resultados fueron anunciados a fines de diciembre de 2021 y benefician a tres investigadoras de centros con base en la FCFM, quienes podrán desarrollar sus proyectos por un año.

Fondo financiará iniciativas provenientes de 10 regiones

Como parte de los esfuerzos del Gobierno para enfrentar la compleja crisis hídrica por la que atraviesa Chile, el Ministro de Ciencia, Andrés Couve, junto a la Directora de la Agencia Nacional de Investigación y Desarrollo, Aisén Etcheverry, dieron a conocer los 21 proyectos seleccionados del Fondo de Investigación Estratégica en Sequía, convocatoria extraordinaria de $6 mil millones para promover el desarrollo de soluciones de I+D frente a esta emergencia.

“Este concurso inédito nos permitirá apoyar a 21 proyectos de excelencia en áreas como las ciencias agrícolas, ingeniería, microbiología, oceanografía y geografía, para contribuir con nuevo conocimiento y soluciones tecnológicas a los desafíos de la sequía y sus consecuencias. La convocatoria es el resultado de un aprendizaje de cómo el Ministerio de Ciencia se constituye en una pieza estratégica en la respuesta del país frente a emergencias como esta. Lo hicimos anteriormente frente al COVID-19, y hoy contribuimos con generación de conocimiento a los esfuerzos públicos y privados que se impulsan desde la Mesa Nacional del Agua y el Comité de Ministros por la Sequía”, señaló el ministro Andrés Couve.

Según explicó la autoridad, la iniciativa se enmarca en el Plan de Emergencia contra la Sequía del Gobierno que busca aumentar la disponibilidad de agua, y mejorar la eficiencia en su uso a través de la inversión en infraestructura, de fomento al riego y mediante medidas regulatorias y de gestión.

Del total de postulaciones recibidas en esta convocatoria se adjudicó el 55% de los proyectos, los que serán desarrollados en el plazo de un año por centros y universidades en regiones, desde Tarapacá hasta Aysén. Entre las iniciativas seleccionadas se encuentran sistemas de monitoreo y alerta temprana, propuestas para la recuperación de aguas residuales, estudios sobre el impacto de la sequía en cultivos, tecnologías para la sustentabilidad hídrica en la industria agrícola y minera, y herramientas para el desarrollo de soluciones basadas en la naturaleza para mitigar los efectos de esta emergencia.

Conoce los proyectos de los centros alojados en la FCFM

Linda Daniele (CEGA), Andreina García (AMTC) y Camila Álvarez (CR)2 lideran proyectos sobre aguas subterráneas, reutilización del recurso hídrico en relaves mineros y monitoreo de sequía, temas prioritarios para Chile, donde la escasez hídrica y la megasequía han afectado a gran parte del país desde hace más de una década.

“Rompiendo el paradigma de recarga actual en el centro de Chile: un pozo profundo para la estimación de flujos de agua subterránea andina”, es el proyecto encabezado por Linda Daniele, investigadora del Centro de Excelencia en Geotermia de los Andes (CEGA) y académica del Departamento de Geología, que propone un estudio hidrogeológico integral para obtener observaciones directas de los flujos de aguas subterráneas andinas.

“La creciente demanda de agua, alimentos y energía, más el agotamiento de la calidad del agua superficial y los efectos de los cambios climáticos, están dando como resultado una mayor dependencia de las aguas subterráneas, que representa la mayor reserva de agua dulce no congelada del planeta. Comprender el proceso de recarga del agua subterránea es fundamental para una gestión eficiente y sustentable del recurso hídrico”, señala en su propuesta la investigadora del CEGA.

La severa sequía que ha experimentado el centro de Chile ha aumentado la demanda de agua subterránea, generando una alarmante disminución del nivel freático, sostiene. El estudio permitirá tener observaciones directas de los flujos de aguas subterráneas andinas en la cuenca del Aconcagua a través de la perforación de un pozo profundo (mayor a 450 m). “Se alcanzará una mejor comprensión de los procesos que gobiernan el ciclo del agua en el centro de Chile. Las mediciones directas de recarga otorgarán un mejor conocimiento de los recursos hídricos de Chile Central y promoverán una toma de decisiones con base científica”, asegura.

En el Centro Avanzado de Tecnología para la Minería (AMTC), la investigadora Andreina García, también profesora en los departamentos de Ingeniería Civil e Ingeniería de Minas de la FCFM, es directora alterna del proyecto “Tecnología y modelación avanzada para recuperación y remediación de agua desde depósitos de relaves para su reutilización sostenible”. La investigación, encabezada por Yasna Tapia, académica de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la U. de Chile, pretende contribuir al desarrollo de modelos y tecnología para reducir las pérdidas de agua en los depósitos de relaves mineros y crear metodologías para su remediación y reutilización en el contexto de la economía circular.

“La gran industria minera del cobre en Chile, ante la escasez de agua, debe velar por incrementar la eficiencia e innovar en el uso y reutilización del agua. En las zonas áridas y semiáridas, donde se realiza principalmente la minería, el uso del agua es un factor crítico y su consumo impacta de manera significativa los ambientes donde se desarrolla, generando potencialmente graves problemas socio-ambientales”, indica García. El desarrollo de tecnologías o procesos que contribuyan a una mayor eficiencia en el uso del agua, y promuevan su reutilización, impacta no solo en la extracción y procesamiento de minerales, sino a actores clave, como las comunidades aledañas y su entorno.

El proyecto pretende establecer un modelo matemático combinado de gestión del agua y un enfoque aditivo novedoso para reducir las pérdidas de agua en las presas de relaves mineros; reducir la concentración de arsénico, molibdeno y sulfatos en aguas de relaves, mediante el desarrollo de tecnologías sustentables para alcanzar niveles que cumplan con la normativa chilena de calidad de agua para riego agrícola; desarrollar y aplicar herramientas para evaluar el impacto de las aguas mencionadas; y capacitar capital humano avanzado en el uso del agua en minería. Utilizarán aguas obtenidas de relaves de la Región de Antofagasta, donde el agua de proceso tiene contenido de arsénico, y de la Represa Ovejería de Codelco en la Región Metropolitana. “La metodología incluye ensayos con cultivos agrícolas que serán regados con relaves de agua tratadas en biorreactores y procesos de nanofiltración/fotooxidación y adsorción”, describe.

En el Centro de Ciencia del Clima y la Resiliencia (CR)2, la investigadora Camila Álvarez, lidera el desarrollo de una “Plataforma de seguridad hídrica y sequía para la planificación de cuencas hidrográficas: evolución histórica y trayectorias futuras bajo el cambio global”. “La sequía conlleva disminución de la disponibilidad de agua que, junto a una mayor demanda hídrica, instala grandes desafíos para la gestión del agua. En esta propuesta, consideramos estrategias para afrontar sequías y escasez de agua, e identificamos las brechas que merman su efectividad”, señala la investigadora.

Su proyecto ofrece una solución científica para abordar esas brechas y una plataforma para transferir información y conocimiento que apoye al proceso de toma de decisiones. “Reconstruiremos la disponibilidad y usos de agua en las macrocuencas de Chile para el período 1950-2020, y sus proyecciones al 2065. Abordamos preguntas relacionadas con sequías, eficiencia en el uso del agua y seguridad hídrica, para estimar los límites de uso de agua compatibles con niveles adecuados de seguridad hídrica, y bajo escenarios de mayor frecuencia de sequías”, agrega. La plataforma incluirá cuatro herramientas: monitor de sequía, explorador de seguridad hídrica, simulador de gestión de cuencas hidrográficas, sequías y divulgación del ciclo del agua en Chile.