Juicios por jurado: Expertos y expertas contrastan posturas en torno a la posibilidad de este sistema en Chile

Juicios por jurado: Expertos/as contrastan posturas sobre el sistema

Algunos expositores indicaron que los países en los que existen juicios por jurados, estos no se utilizan en suficientes casos como para realmente educar a suficientes personas.El pasado jueves 12 de noviembre se llevó a cabo la primera jornada preparatoria del I Congreso Estudiantil de Derecho Procesal, que tuvo como tema de discusión la eventual adopción de un sistema de juicios por jurado en el proceso penal en Chile, a propósito del proceso constituyente que se avecina y haciendo eco de las voces que han planteado este sistema como una vía de solución a un problema de legitimidad del sistema.

Por esta razón, los organizadores del encuentro plantearon un debate abierto, incorporando las posturas de expertos y expertas que se encuentren tanto a favor como en contra, o al menos miren esto desde el escepticismo.

Los profesores Diego Palomo Vélez (Universidad de Talca) y Rafael Blanco (Universidad Alberto Hurtado) entregaron argumentos a favor, tanto por razones jurídico-procesales como políticas. Las primeras dicen relación con la mejora de la calidad de los juicios: por la exigencia que representa para los operadores del sistema el enfrentarse a un jurado imparcial, heterogéneo e inexperto, que los obligará a refinar sus técnicas de litigación; las mayores garantías que entrega este juicio a los imputados, por la existencia del voir dire, que es la posibilidad de los intervinientes de recusar a integrantes del jurado con o sin expresión de causa, lo que implicaría eliminar a los miembros sesgados; y por la refinación de los controles de admisibilidad de la prueba, que evitaría que evidencia de mala calidad o ilícita contaminara el juicio. En segundo lugar, los juicios por jurados serían una forma de educar cívicamente a los ciudadanos y ciudadanas, acercándolos al proceso penal.

En tanto, la académica Andrea Lema (Universidad de Chile) y el profesor Julián López (Universidad de Chile) se plantearon escépticos al respecto, indicando que son quienes pretenden introducir esta institución los que deben dar buenas razones para ello, y no en sentido contrario. Así, presentaron sus dudas sobre si el problema de legitimidad del sistema judicial radica en el juicio oral -que se propone reemplazar por el juicio por jurados—o si en realidad esta etapa del procedimiento es tan restringida que son otros los momentos del proceso en los que hay que poner atención. Además, si se consideran los países en los que existen juicios por jurados, estos no se utilizan en suficientes casos como para realmente permitir educar a suficientes personas.

Por último, el profesor Jordi Ferrer (Universitat de Girona) y la profesora Daniela Accatino (Universidad Austral) cuestionaron la capacidad del jurado de arribar a decisiones legítimas, puesto que al no motivar su sentencia no será posible conocer las razones que generan una condena o absolución. Esto, porque la calidad de la decisión se ve favorecida por su fundamentación, al permitirle a las partes saber que sus pruebas fueron oídas y valoradas racionalmente. El profesor Ferrer, además, considera que los esfuerzos por afinar las decisiones judiciales se echan por tierra con intentos como estos, que vuelven atrás años de avance en el razonamiento sobre la verdad que deben realizar los tribunales, debido al aumento en la dificultad de la evidencia a incluir, valorar y someter a un estándar de suficiencia para dar por probada la hipótesis defendida en el proceso.