Cuando era soltero
vivía solo
y trabajaba en la industria
textil
y mi único error imperdonable
fue cortejar una muchacha
rubia
la cortejé en invierno
como también en verano
y mi único error imperdonable,
fue protegerla del
neblinoso rocío
una noche
en que estaba profundamente
dormido
me despertó su llanto
desesperado
parecía una loca
arrodillada ante el
lecho nupcial
qué hacer para consolarla
qué hacer para arrebatársela
al neblinoso rocío
corroborarla con afecto
profundo
y la estreché en mis
brazos como nunca
De nuevo soy soltero
vivo con mi hijo
los 2 trabajamos para
la industria textil
y cada vez que lo miro
a los ojos
me recuerda aquella
joven inexplicable
recuerdo los inviernos
y también los veranos
en que yo la abrazaba
y la besaba
para arrebatársela
al neblinoso rocío
de Poemas
para combatir la calvicie. Antología. (Santiago, 6ªed., Fondo de Cultura
Económica, 1998)
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